Con los Ojos Vendados

Ya que hablamos de amores platónicos y de sentimientos encontrados, se me ocurrió contar esta historia, bueno una pequeña experiencia de alguna persona.
Era lunes, y Kelly tenía que ir a estudiar, muy temprano como de costumbre, lo hizo
Pensaba sólo en alcanzar sus sueños y estaba muy entusiasmada con todo lo que vendría, y pensar en chicos era último que se pasaba por su cabeza, (lo que muchas de las mujeres decimos, al comienzo).
Todo estaba normal, le iba muy bien…y un día de esos tan apurada llegó a clases, se sentó y al observar los asientos de sus compañeros, vio a un chico, menor que ella, delgado, ojos claros y con una sonrisa que llenaba el cielo. Se quedó mirándolo, mientras él también a ella. ¡No puede ser!, dijo. Es muy lindo, pero no! No me quiero desconcentrar. Pasaban los días y ella cada vez lo miraba más; se llegaron a conocer, hablaban poco, pero sólo eso ya era suficiente. Ella tenía miedo de enamorarse, (lo que a muchas nos pasa) tenemos miedo de que él no sea el indicado, que tal vez hemos visto mal! , pero era inevitable. Él era dos años menor que ella, y era tan maduro, tan inteligente, tan pacífico; que ella no podía sacarlo de su mente. Y es así que ese sentimiento le dio vida a aquella paloma que llevaba dentro, por mucho tiempo estuvo reservada, guardada para los estudios, trabajos en grupo, actividades en general, que no se había dado cuenta que había dejado morir la mujer que llevaba dentro…y que con sólo una mirada él pudo darle vida.
Pero esto no es todo, esta ilusión se hacía cada vez más grande. Y el temor también, ella tenía miedo de que sólo sea una simple ilusión y que él no sintiera lo mismo, ¿estaré linda hoy? , ¿Habré dicho lo correcto? se preguntaba, quería cautivarlo, quería saber más de lo que decían sus ojos… claro pero eso no era posible.
Tenía tanto amor para dar que no sabía cómo darlo, no sabía cómo demostrarle lo importante que él era para ella. Sus amigas le aconsejaban de forma bastante arrebatada!- pero que esperas dile que es el amor de tu vida-

- yo que tú actuaría más rápido- , ella pensaba que eso no estaba bien y quería ir lento pero seguro.
Una noche decidió hablar con Dios y peguntarle si sus sentimientos estaban bien dirigidos, ella temía darle su amor a alguien que no la valorara, que no la mereciera, así que pidió la guía de Dios, pidió que él la cuidara, la tomara del brazo y sea ese amigo que le dijera que paso debía de dar.
Es así que al día siguiente… bueno esto lo contaré después

Escrito por: Stefani